En ella encontraremos recuerdos de la ocupación anglosajona en Menorca, una ciudad de comerciantes que los ingleses convirtieron en capital de la isla. Es muy agradable el paseo por su puerto.
Qué visitar:
Fortaleza de la Mola: en la misma bocana del puerto.
Museo de Menorca: situado en un viejo convento, muestra objetos del periodo prehistórico muy abundantes en la isla.
El Ayuntamiento: en el encontramos el reloj que trajo el gobernador inglés Richard Kane.
Bastión de Sant Roc: un resto de la puerta principal de la muralla que rodeaba a la ciudad.
La capilla de Santa María: con su órgano del siglo XIX.
Esta rodeada por el Parque natural de s’Albuferad’Es Grau, Illa d’ en Colom y Cap de Favaritx.
En los alrededores encontramos bellas calas y playas con aguas de color turquesa y arena fina.